sábado, 8 de diciembre de 2018

VÓMITO DEL HARTAZGO

Por esa herida de los muchos años, por esa marca, soberbia y tirana, que levantó sobre tu infancia, insensatos laberintos, por esa herida, la veneración de tu pasado, la retención, la cruz cargada más de lo debido, por esa herida de campanas de besos en olivos de Judas que te abrazan, válgame la herida, la pérfida, la mala, la tosca, la insensata, válgame su antigua rosca de inalcanzables paraísos, por esa herida: la libertad que no te alcanza. Acaso, empedernido corazón, ya no dió todo de tí una sola lágrima? Ya no bastó la sal impresa en sus entrañas? Ya no gritó su angustia, su desespero, su último gemido de plegaria, esa sola y pura, ingenua lágrima? Una sola basta para sanar, una sola basta, corazón dolido, el resto es puro desamor, indignación, incapacidad de olvido.

Prosas Poeticas